Este clásico del cine no se podía escapar de ser elaborado desde un punto técnico, teórico, práctico. No se evalua la mala suerte de la protagonista por caer al azar justo sobre un delirado edípicamente, ni la del dueño del motel por no encontrar el suculento botín.
Es común ya, que el arte del cine confunda alucinaciones auditivas por visuales, pero aqui curiosamente adapta la idea que el muchacho solo oye y toma las ropas de la madre en afán de darle vida de forma sonora y corpórea, y sin pérdida de tiempo accione en consecuencia aun más temible que la misma madre en vida.
El vínculo que intenta mostrar la película de madre-hijo completamente indiferenciable puede encuadrarse, como dice el diagnótico del título, en psicosis, al modo que entiende la psicología tradicional, teniendo en cuenta los síntomas podría hablarse de esquizofrenia por el vigor emocional de las alucinaciones. El lugar hegemónico que ocupa la madre se da comúnmente en estos cuadro, aun cuando estuviese muerta perdura en la realidad mental de su hijo, en este caso, dentro de su cuerpo.
Este tipo de conductas en un enfermo que padece estas percepciones que lo alejan de la realidad, no sería algo que surge a partir de una perdida, como se argumentaría en la trama de que por celos habría matado a su madre y a su pareja, no queda claro en el juicio de con que tipo de enfermedad tratan al protagonista, ya que los avances de los diagnóticos en salud mental en esa época no eran muy diferentes al actual, sólo se diferenciarían por el tipo de tratamiento psicofármacológico que todavía no habían copado el mundo de la salud. Se habrían focalizado en el travestismo pero de la enfermedad mental "ni fu ni fa", siendo mucho rico el vínculo enfermizo con la madre quedarse con el tema de la ropa, es como entrar a robar un banco sólo llevarse los picaportes.
No voy a comentar sobre las secuelas posteriores ya que arruinan totalmente todo logrado por al original, y no hacen más que pensar que el cine es un negocio y nadie hace nada por el arte. Esta la precuela en forma de serie que será oportunamente evaluado.