The Tenant (IMDB) "Loco un poco nada más..."
Todos los prejuicios de la locura, los locos, la experimentación en pacientes, la ambición psicopática, el deterioro de la humanidad como especie hacia un progreso egoísta de reconocimiento y mucho más en esto que denominamos como "El cine que enferma".
Todos los prejuicios de la locura, los locos, la experimentación en pacientes, la ambición psicopática, el deterioro de la humanidad como especie hacia un progreso egoísta de reconocimiento y mucho más en esto que denominamos como "El cine que enferma".
El prejuicio es una herramienta que se usa cuando se busca identificación con la mayoría del mundo, ya que se puede ver que mucho disfrutan de hablar sin saber. Esto ya no sorprende, el prejuicio busca ahorrarnos el camino de la propia investigación, y restarnos el trabajo con frases como "lo vi por internet" o "alguien me contó que un amigo del primo que vive en Australia... etc" son parte de la atrofia volitiva motivacional que somos victima cuando no apelamos a nuestros propios medios para engendrar un criterio de nuestra autoría, quedando en la comodidad de ser pasivo del conocimiento que se adhirió como moscas a un parabrisas del cual nunca extirpamos.
Una internación médica es quizá de las instancias más angustiante de un ser humano, cuando el cuerpo requiere de los cuidados extremos y de estos puede depender la vida. En este grupo entran las denominadas enfermedades psiquiátricas donde un penar mental deja sin libertad a las persona a la persona que lo padece.
Atacar al cine por el lado más flaco se podría subtitular esta crítica, siendo que se trata de una producción de bajo presupuesto, poca distribución e insuficiente etc... como si estos ítems fuera justificativos para paliar el dolor de ojos y la desinformación que chorrea de la pantalla, cuando a menos recursos más creatividad es requerido.
Atacar al cine por el lado más flaco se podría subtitular esta crítica, siendo que se trata de una producción de bajo presupuesto, poca distribución e insuficiente etc... como si estos ítems fuera justificativos para paliar el dolor de ojos y la desinformación que chorrea de la pantalla, cuando a menos recursos más creatividad es requerido.
Pero bueno para hacer más grotesco, dramático y bizarro un contexto que justifique el horror o un personaje siniestro mintamos de troche a moche... total... de prejuicios se educa, alimenta y vive el ser humano. Esta película versa sobre un sin fin de lugares comunes y mal trato del tema de la salud mental ... pero claro existe la amenaza de vida que se puede encontrar al salir al mundo externo e informarse, como si estando calentitos en el sofá de la propia casa se evitan los peligros... cuando el porcentaje de asesinados es mayor a manos de conocidos en comparación con los desconocidos.
Poner en contexto se hace inevitable y contar con algo de información que ayude a pensar el fenómeno de la falta de creatividad y la forma en que se entraman con los prejuicio y mitos urbanos infundados hace detener el ojo sobre el mensaje que uno ve pasar.