lunes, enero 13, 2020

Personajes: Daenerys Targaryen

Actriz: Emilia Clarke  

  Ya habiendo terminado el insufrible hastío publicitario hegemónico de la serie, y emancipados de este juego de etc. Me detendré en la protagonista indiscutida de esta serie humanidades bajas reptantes, la madre de los ídems alados con aliento avernal, y en sí ver si su cometido fue alcanzado en la vida que le tocó vivir vivida vívidamente.
  Salvando los detalles fantasiosos preponderantes que aquí será minimizados y denostados para poder evaluar la construcción subjetividad de este personaje a lo largo de las temporadas, diré  con certeza quien muere en el último capítulo es quien lleva en su espalda el protagonismo total; en cuanto a las otras historias son muy lindas y blah... porque más allá de los esfuerzo que se dan en otros entornos, climas y actuaciones son accesorios de este personaje. ¿Se podría haber cortado todo lo demás y quedarnos con Dani? Si, pero eso se llama película y no telenovela. ¡Ehh como le vas a decir culebrón a esta serie!... vilipendienme espectadores y especialistas, pero hay que tener conciencia de clase.
  El camino de esta heroína, quizás sea "la" de la década. Muestra un comienzo donde tiene que enfrentar una serie de apremios familiares iniciales, donde se ve sometida a la perdida de posición de poder que según su descendencia le correspondería. Si bien podría haber dejado su inexsistente legado, y tener una vida a la altura de su momento, seria una serie seria en esa opción. Pero vamos por el lado de hacer bardo. Parece ser que por empuje de su hermano emprenden la búsqueda reivindicatoria apellidesca, valiéndose de una estrategia cafiolística sobre ella para acceder a algún poderoso heterosexual. Esto hace pensar que por parte de su familia sólo tendría pesar y frustración, instancias que la podría alejar de su supuesta herencia de liderazgo que llevaría en los génes.
  La transformación de esta reina sin corona parece no someterse a los deseos fraternales, no quedando claro inicialmente  pero si Frente al sacrificio de este a manos del incandescente oro líquido; quedando sola con sus huevos de dragón (real y simbólicamente) experimenta su inmortalidad frente a temperatura que derretirían al sol, ya se ve que no al tramontina. 
  ¿Se solidificarían un sentido en la ausencia de pérdida? Serían imposible de evaluar para la construcción subjetiva que conocemos. Si es llamativo que a pesar que tienen un cuerpo, instinto y conductas de humano, nunca surge un stress postraumático, una pregunta hacia dónde va... o si estará haciendo bien matando tanta gente para conseguir lo que busca.
  La competencia entre familias de la realeza se puede ver hasta estos días, por ejemplo cuando el estado le sube los impuestos a la soja en argentina. Esta puja tiene la misma antigüedad que la humanidad, voluntad para alcanzar su objetivo (las más sanas.. obvio). En el caso que estamos pensando, no habría familiares presentes... si historias y compañeros circunstanciales leales, o casi; dibujándose así una nueva familia armada para la corona futura.

  Esta heroa más un modelo para armar, es un camino sin asfaltar.
  Es posible que sobre la omnipotencia se arme una perspectiva de vida del todolopuedismo, pero no lo podemos asegurar esto, porque hasta los que gambetearon el deceso y héroes de guerras, luego viven bajo la sombra de sus recuerdos de lo vivido, coqueteando con la religiosidad o manteniendo conductas violentas, pero nunca llegan a presidentes o líderes carismáticas. La inexistencia de la muerte puede justificar decisiones, como así también la infinitud de posibilidades estadísticas del humano, pero para pensar posible esta historia me quedo sin argumentos.
  Termina siendo, lo que no se sabe como es... cualquier cosa puede pasar.